acusación

Además  exigen a los profesionales  que se bauticen si quieren seguir ejerciendo.

Bastó que se negara  a pagar  el diezmo que exige el Colegio Adventista de Copiapó para que lo despidieran; eso le sucedió a Gabriel Saavedra Hurtado un profesor de educación básica, que hace unos días atrás fue desvinculado de esta entidad educacional; según él por negarse a que le descontaran el 10% de su sueldo cada mes.

Según la denuncia, esta situación se arrastra desde hace tres años atrás, cuando este profesional se negó a firmar una cláusula de contrato donde  se le exigía dicho descuento que para este profesor significaba unos 70 mil pesos (teniendo en cuenta que su sueldo bordeaba los 700 mil ). Tras esto, las cosas cambiaron drásticamente ya  que el trato hacia el profesional fue otro,  algo  que finalmente terminó con su desvinculación hace unas semanas atrás.

Pero esta no es la única cláusula que  tiene el colegio,  porque además  hay otra donde exigen a los profesionales bendecirse para seguir ejerciendo su trabajo. Incluso, una profesora de educación física ya fue notificada de su desvinculación  por negarse a dicha acción.

Según Gabriel Saavedra, el objetivo de esta  denuncia es que la comunidad  conozca  cómo se maneja  la administración  de estos  colegios  que son gestionados por  entidades  religiosas que  muchas veces coartan  la libre expresión.

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