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Para cualquiera que haya prestado aunque sea un poco de atención a los acontecimientos políticos (y fiascos de diversos tipos) en el panorama político de California en estos últimos años, el mero hecho de que el gobernador del estado siga siendo un tal Gavin Newsom es una historia que vale la pena contar, en su totalidad. de sí mismo.

Pero, dado que Newsom todavía está allí, parece estar decidido a aprovechar “lo mejor” su controvertido, por decir lo menos, tiempo en el cargo. Y esto es algo extraordinario: aparentemente inspirado en un viaje a China y, aparentemente, enfocado en traer alguna versión del temido y odiado (entre los amantes de la libertad) “sistema de crédito social” a su, por lo demás, Estado Dorado.